Los Juegos Olímpicos de Tokio en 2020 東京五輪
Una resurrección
Los Juegos Olímpicos de Verano de 1964 fueron el símbolo de la reconstrucción de Japón que quedó en ruinas después de la guerra. Los Juegos Olímpicos del 2020 quiere curar las heridas de la catástrofe del 11 de marzo del 2011.
La recuperación industrial y del comercio exterior le permitieron a Japón reactivar su economía en los años 50. El país pasó por un período difícil pero logró convertirse en una gran potencia mundial. Se trata del "milagro económico" japonés. Este punto de inflexión en la historia del archipiélago tuvo como símbolo los Juegos Olímpicos de 1964 en Tokio. Japón se reconstruye como un país dinámico y moderno.
Múltiples intentos
El éxito de los Juegos Olímpicos de 1964 todavía hoy marca la mente de los japoneses que ven en los Juegos Olímpicos del 2020 una oportunidad para recuperarse de la devastación causada por los desastres ocurridos el 11 de marzo del 2011.
Pero la solicitud de Tokio para albergar los Juegos Olímpicos en el año 2016 fue un fracaso, a pesar de ser un proyecto "verde" y del gasto de cerca de quince mil millones de yenes. La razón de este fracaso fue la falta de apoyo de los habitantes de Tokio quienes argumentaron en contra del aumento de los impuestos locales para financiar las obras y de un posible exacerbamiento de los problemas financieros del país.
Sin embargo, en septiembre del 2013, Tokio fue elegida para los Juegos Olímpicos del 2020, por encima de Doha, Madrid, Roma y Estambul.
Un buen detonador
Según el comité de candidatura de Tokio, la adjudicación de los Juegos Olímpicos del 2020 en Japón verá un impacto económico de cerca de tres mil millardos de yenes.
A pesar del rechazo en el pasado, ser la sede de los Juegos Olímpicos en 2020, ahora representa para los japoneses una manera eficaz para impulsar la economía del país. La ceremonia comenzará con un símbolo muy poderoso: la antorcha olímpica saldrá de las zonas afectadas de Tohoku hasta Tokio.
Un proyecto de gran envergadura
Sin escatimar esfuerzos,Tokio tiene la intención de volver a utilizar y mejorar las instalaciones ya existentes, "herencia" de 1964.
Pero también se van a construir en la zona costera una serie de edificios de gran escala que van a cambiar drásticamente el aspecto de la ciudad. Por ejemplo, el futuro centro acuático o el un nuevo estadio Olímpico futurista de 80.000 asientos con techo retráctil - un proyecto muy polémico que va a sustituir el estadio nacional de la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de 1964.